1-Velocidad promedio de Arrastrarse.
La velocidad a la que un niño se arrastra puede
variar bastante, pero generalmente es más lenta
que la velocidad de gateo. En promedio, los bebés
pueden arrastrarse a una velocidad de
aproximadamente 0.5 a 1 kilómetros por hora.
2-Velocidad promedio de gateo.
La velocidad de gateo de un niño puede variar
bastante, pero en general, los bebés pueden
alcanzar velocidades impresionantes después de
algunas semanas de práctica. Aunque no hay una
velocidad específica estándar, algunos bebés
pueden gatear a una velocidad de
aproximadamente 1 a 2 kilómetros por hora.
3-Velocidad promedio de caminata.
La velocidad a la que un niño camina puede variar
según su edad, condición física y nivel de
desarrollo. En general, los niños pequeños suelen
caminar a una velocidad promedio de
aproximadamente 2 a 3 kilómetros por hora.
A medida que crecen y desarrollan más fuerza y
coordinación, esta velocidad puede aumentar.
Por ejemplo, un niño de 12 años puede caminar a
una velocidad promedio de entre 4 y 5 kilómetros
por hora. Es importante recordar que cada niño es
diferente y puede tener su propio ritmo de
desarrollo.
4-Velocidad promedio de correr
La velocidad a la que un niño puede correr varía
según su edad, condición física y nivel de
entrenamiento. En promedio, un niño de 12 años
puede correr a una velocidad de entre 9 y 14
kilómetros por hora. Sin embargo, algunos niños
pueden ser más rápidos, especialmente si
participan en deportes o entrenamientos
específicos que mejoran su velocidad.
5-Velocidad promedio al andar en bicicleta.
La velocidad promedio a la que un niño puede
andar en bicicleta varía según su edad, condición
física y el tipo de bicicleta que utilice. En general,
los niños suelen andar en bicicleta a una
velocidad de aproximadamente 10 a 15 kilómetros
por hora.
Esta velocidad puede ser menor si están
aprendiendo a andar en bicicleta o si el terreno es
irregular. A medida que ganan más confianza y
habilidad, es posible que puedan alcanzar
velocidades más altas.
6-Velocidad en relación con una caída.
La velocidad de una caída depende de varios
factores, como la altura desde la que el niño cae y
la aceleración debida a la gravedad. En términos
generales, la velocidad de una caída libre se
puede calcular usando la fórmula:
v=2gh
donde:
•( v ) es la velocidad final,
•( g ) es la aceleración debida a la gravedad
(aproximadamente 9.8 m/s²),
•( h ) es la altura de la caída.
Por ejemplo, si un niño cae desde una altura de 1
metro, la velocidad al impactar el suelo sería
aproximadamente:
v=2⋅9.8m/s2⋅1m≈4.4m/s
Es importante tener en cuenta que la velocidad de
impacto puede variar dependiendo de otros
factores como la resistencia del aire y la postura
del niño durante la caída.
Hay que tener muy presente lo siguiente:
-Una caída de 3 pies de altura o alrededor del
metro aproximadamente, raramente resulta en
una fractura simple lineal de cráneo o clavícula.
Generalmente solo hay lesiones de tejidos
blandos y se observa el cambio de coloración del
golpe desde rojo a negro, luego a azul y
posteriormente a verde y finalmente amarillo en
un tiempo variable de una semana a un mes.
-Las caídas de 6 pies de altura o alrededor 2
metros, raramente producen conmoción cerebral,
hemorragia subdurales o laceraciones.
-No se reporta muerte o daño cerebral en caídas
de menos de 10 pies o 3 metros.
Las fracturas múltiples y costales posteriores son
muy sospechosas y virtualmente patognomónicas
de maltrato y son producidas por compresión
severa de tórax; con mucha frecuencia asociada a
trauma cerebral.
Además es importante tener en cuenta la
siguiente referencia.Un impacto a una velocidad
30 km por hora contra un objeto inmóvil como un
vehículo parado, un muro o un árbol, es similar a
una caída desde un primer piso
o aproximadamente 4 metros de altura por lo que
es indispensable usar el cinturón de “seguridad”
en el vehículo.
Tener siempre bien comprendido que al aumentar
la velocidad de desplazamiento se disminuye el
campo visual.
7-El triple impacto de una lesión humana.
El “triple impacto” de una lesión humana,
especialmente en el contexto de un accidente
automovilístico, se refiere a las tres colisiones que
ocurren durante el evento:
1-Colisión del vehículo: Es el primer impacto,
donde el vehículo choca con otro objeto, como
otro vehículo, un árbol, o una barrera. Este
impacto puede causar daños significativos al
vehículo y a sus ocupantes.
2-Colisión humana: Es el segundo impacto, donde
los ocupantes del vehículo, que aún están en
movimiento, chocan con el interior del vehículo,
como el volante, el tablero, o los asientos. Este
impacto puede causar lesiones graves, como
fracturas, lesiones en la cabeza y el cuello, y
daños internos.
3-Colisión interna: Es el tercer impacto, donde los
órganos internos de los ocupantes, que también
están en movimiento, chocan con el esqueleto o
entre sí. Este impacto puede causar lesiones
internas graves, como hemorragias, daños en los
órganos y otras complicaciones internas.
Comprender estos tres tipos de colisiones puede
ayudar a evaluar mejor las posibles lesiones y la
gravedad de un accidente.
No olvidemos que la protección desde el respeto,
permite manejar los riesgos y tener las debidas
precauciones.
Dr. Bosco Alcívar Dueñas. Md.
Pediatría Integral