Es onda expansiva y es la energía sin par,
está en un organismo nuevo con vitalidad,
que es rápido en crecer y lo es en reparar,
que es pequeño y aumenta con velocidad.
Se expresa con creatividad y con inteligencia,
está lejos de lo que es la pura racionalidad,
es observación, es reflexión y clarividencia,
es la reserva y el recurso para la humanidad.
Es un microcosmos y coexiste en plenitud,
y lo social le es indiferente y no es su conexión,
es la esencia lo que el rescata de la multitud,
desde lo mágico y lo simbólico como condición.
Es divinidad y serenidad, y su rostro es el amor,
es plenitud, es la alegría y es la dicha, es gozo,
es un fluir sin incomodidad ni con el mínimo temor,
es estar muy contento y admirar todo lo hermoso.
Es sin espacio, es sin tiempo y sin la cultura,
es el mismo vacío que no quiere ser contenido,
es el aquí y es el ahora, es belleza y una criatura,
soy un niño, soy completo y no debo ser omitido.